x

Te suscribirás a nuestras alertas


Le avisaremos cuando el producto vuelva a estar disponible


Salud Digestiva Gatos

Si tu gato está en un periodo con bajas defensas, ha salido de una enfermedad reciente o sencillamente tiene un virus gastrointestinal. Con los probioticos de Housepet lograrás que ese periodo sea mas llevadero.

Hay 11 de productos.

Ordenar por:
Mostrar 1-11 de 11 elemento(s)

Puede que tu gato tenga una salud de hierro. Pero incluso el felino más sano puede pasar por algún molesto trance que incluya disfunciones intestinales, diarreas, estreñimiento, vómitos, alergias… los padecimientos pueden ser muchos, así que es mejor estar preparados. ¿Cómo? Administrándole probióticos para gatos.

¿Qué son los probióticos para gatos?

Podemos decir que forman parte de un grupo de “amigables” bichitos alojados en nuestra flora intestinal, conocidos como bacterias. No es nada nuevo. Tanto las bacterias en general como los probióticos en particular se conocen desde hace mucho tiempo. El químico y bacteriólogo Luis Pasteur observó sus efectos incluso en tiempos tan lejanos como el siglo diecinueve.

Muchas bacterias causan enfermedades crónicas e infecciones. En este caso los probióticos son los “tipos buenos” de la película. Ante diversas circunstancias como eventos de estrés, o cualquier enfermedad que debilite el sistema inmunitario, las bacterias dañinas se descontrolan, reproduciéndose excesivamente en el interior de tu mascota. Ha llegado el momento de echar mano de los probióticos para gatos.

¿Cómo actúan los probióticos para gatos?

Todos somos huéspedes de miles de estos bichillos, incluso nuestro amigo felino. Viven en nuestro colon y otras partes del sistema digestivo. Su función es actuar a modo de barrera para evitar los ataques de patógenos dañinos.

Su método es en verdad muy simple. La flora bacteriana devora los nutrientes, se adueña de todo el espacio y "compite" con bacterias dañinas. Sin sitio donde respirar y comer, se les vuelve imposible quedarse. Y si no se quedan, no nos atacan. Un sistema en verdad muy simple, pero de una efectividad a prueba de fuego.

Estos microorganismos también interactúan con nuestro sistema inmunológico, modulándolo. Numerosas enfermedades autoinmunes guardan una estrecha relación con cambios en nuestra flora intestinal. Son múltiples las formas en que llegan a nuestro sistema. A través del alimento. También al nacer, gracias a la lactancia materna.

Beneficios de los probióticos para gatos

Son muchos. Entre ellos puedes contar que los probióticos para gatos influyen de manera decisiva y beneficiosa en la mejora de casos de diarrea y enfermedades intestinales crónicas. Administrar probióticos a tu gato también fortalecerá su sistema inmunitario. Y en algunos casos es incluso capaz de cortar de cuajo infecciones agudas de origen bacteriano.

Algunos probióticos buenos para gatos

Lactobacilus brevis, Lactobacilus buchneri, Lactobacilus rhamnosus, Lactobacilus acidophilus, Lactobacilus casei, Bifidobacterium bifidum.

Probioticos para gatos con diarrea

Saccharomyces Bouladii indiscutiblemente es uno de los mejores probióticos para gatos con diarrea. Se trata de una levadura. Sus resultados en casos de diarrea aguda, sobre todo si se combina con un tratamiento adecuado con antibiótico, si este es necesario, son excelentes. Este probiótico acostumbra usarse en casos de diarrea producida por clostridium difficile, un microorganismo parásito muy dañino y difícil de eliminar del intestino del gato.

¿Cómo administrarle probióticos a mi gato?

En verdad es muy sencillo. Los probióticos para gatos vienen en forma de polvo. Generalmente en cápsulas, pero también puedes encontrarlo suelto. Se administra por vía oral. En el caso de las cápsulas debes darte maña para que as trague sin llevarte algunos arañazos. En polvo es mucho más sencillo. La mayoría de estos suplementos son casi sin sabor y basta con que logres enmascararlo en el agua o en su comida favorita.

¿Por cuánto tiempo debo hacerlo?

Eso debe responderlo tu veterinario. Consúltalo con él. Aunque un rango aceptable es hasta una semana, en casos leves. En casos de diarrea aguda o muy líquida, es mejor que no te arriesgues y busca sin demora ayuda profesional. Un buen especialista puede determinar sin margen de error si el probiótico que usas es el adecuado y el tiempo óptimo de duración de su tratamiento.